Un camino al éxito…
Tú negocio o lugar de trabajo es como nuestra segunda casa. Pasamos largas jornadas en el mismo espacio día tras día, por ello, conseguir ambientes más prósperos donde trabajar con más entusiasmo y creatividad resulta clave.
El trabajo energético en estos espacios, busca esencialmente: llenar de armonía cada espacio y en la actualidad son cada vez más empresas las que buscan mejorar sus lugares de trabajo.
Así, cada elemento y su disposición cuenta: la forma de los accesos y escaleras, la iluminación, los colores, los techos, las ventanas y puertas, la ubicación del agua…todo se piensa según los principios del Feng Shui con el fin de asegurar la mejor energía y por ende, conseguir ser más productivos en el trabajo.
A continuación, detallamos algunos preceptos de esta disciplina que, aplicados en tu oficina, pueden mejorar tu actitud hacia las tareas laborales, aumentar tu concentración y tu creatividad.
La entrada: la entrada es una de las zonas más importantes dentro de una oficina, ya que recibe el impacto de las energías y es responsable de su
distribución. Siempre debe estar bien iluminada, limpia y despejada. Si hay recepcionista, ésta debe estar ubicada de tal manera que tenga una buena visión de la entrada, pero nunca enfrentada directamente a la puerta.
El escritorio: Lo ideal es tener una pared detrás, nunca debe haber una puerta. Si contamos con una ventana es ideal aprovechar la luz natural que ingresa por ella colocando el escritorio de costado.
Puertas: Si el escritorio está en línea recta con alguna puerta mejor cambiarlo de sitio para huir de las malas energías que puedan entrar.
Materiales: La madera transmite solidez, estabilidad, confianza. Los escritorios de metal son conductores de energía y nos dejan expuestos a la acción negativa de las malas vibraciones ambientales. Las mesas de vidrio
trasmiten transparencia, agilidad mental y flexibilidad, pero es necesario combinarlo con la madera.
Tonos. Los colores influyen sobre nuestro estado emocional y pueden ayudar a disipar las malas energías. Para aquellos empleos donde la comunicación sea fundamental, los tonos sobre naranja son los más
aconsejables. Los verdes son ideales para quienes trabajan generando ideas. El azul aporta una sensación de calma y el blanco se vincula al trabajo intelectual, ideal para tareas que requieren concentración y
actividad mental.
Ambiente pesado. El aire acondicionado de las oficinas, los monitores de los ordenadores…llenan el aire de partículas con electricidad y un ambiente cargado de iones provoca cansancio y somnolencia. Las lámparas de sal, las piedras de cuarzo o las fuentes de agua contribuyen a limpiar el aire.
Orden. El espacio de trabajo debe estar bien organizado
y limpio, sin muchas cosas a la vista que bloqueen la energía y dispersen la atención.
Naturaleza. Si el lugar de trabajo es pequeño y oscuro puede causar sensación de “cueva”. Mantener algunas plantas o flores en el escritorio puede ayudar, así como colocar fotografías con paisajes de la naturaleza.
Estas pequeñas recomendación pueden cambiar la energía de tu negocio Pero Es necesario realizar un análisis energético; porque puede haber energías de antiguos dueños, que quizás no fueron saludables, o alguien falleció en ese espacio, personas enfermas lo habitaron, son muchas las energías que se deben evaluar y pensando en todo esto se realiza una limpieza energética profunda. Así tu negocio ira camino al éxito.